Prendo fuego a mi casa
10:02
Después de varias horas de viaje en aquel cuchitril de barco llegamos a mi isla, después de atracar bajé al muelle de un salto y me aparté el pelo de la cara.
- Mamá ya está en casa!!! - grité respirando el aroma a mar en el aire, entonces noté el tufo a pescado en mi pelo y recordé que necesitaba una ducha, llamé a algunos de mis secuaces que venían - ya podéis deshaceros de ese montón de morralla de cubierta, cuando vuelva en un par de horas no quiero ver ni un pez!
Mandé a otra persona a coger a los pescadores cautivos que seguían encerrados en una de las habitaciones.
- Llevadlos a la casa, no hace falta que les tapeis la cabeza - sonreí con malicia, mi subordinado tragó saliva y subió al barco, yo marché hacia mi guarida
El camino era largo, desventajas de estar tan escondida, pero me entretuve disparando a las hojas del camino, dejé un rastro humeante a mi paso.
Cuando al fin llegué vi a gente ajetreada de aquí para allá, a mis órdenes, moviendo trastos, armamento, municiones y alimentos. Entré en mi cuarto para ducharme y quitarme el hedor a pescado, cuando salí me puse mi mejor conjunto y observé mi escritorio y paredes, estaban llenas de mapas, planes viejos y otros nuevos en proceso, miles de pruebas.
- Espinas, ¿sabes qué deberíamos hacer? "La colada, fregar los platos, pagar las facturas..." Estúpido lanzacohetes cortarrollos, yo había pensado más en hacer explotar algo, todo es parte del plan que me acabo de inventar, jajajaaj - cogí una caja de cerillas que vi encima de la mesa - no me han dejado alternativa "Podrías molestar a la gente y herir sus sentimientos" ¡Eres la PEOR arma de la historia! Ohhh ¿soy mala persona? - enseñé la lengua a Espinas - “No, pero estás loca, no me gusta ser partícipe de tus locuras” Bueno me halagas, pero harás lo que quiera