viernes, 2 de octubre de 2020

UN PROPÓSITO MÁS GRANDE - CAPÍTULO 2

Uno de vosotros


Cuando desperté me encontraba en una habitación oscura y sin ventanas, como si estuviera dentro de una cueva, tan solo iluminada por una pequeña vela que prendía sobre una modesta mesita. El cuarto era sorprendentemente cálido, retiré las mantas que me tapaban y una toalla mojada que me cubría la frente, me incorporé. Me sentía totalmente aturdida y perdida, el último recuerdo que tenía era de estar dando vueltas en aquella avalancha cuando me alcanzó, <<pensaba que había muerto, ¿Qué habrá sido de Zed y el resto? ¿Consiguieron llegar al otro lado? ¿Escaparían del alud?>>. Me sujeté la cabeza dolorida y decidí no pensar más en ello por el momento, volví a ponerme la toalla mojada y fría. Oí unas voces que se acercaban.