miércoles, 25 de febrero de 2015

ESCAPADA RURAL - CAPÍTULO 8

Decepciones


Me despierto algo mareada, intento enfocar la vista para ver la hora.
<<15:10>> leo en la pantalla de mi reloj digital.

Me masajeo las sienes, me duele un poco la cabeza, además noto la boca pastosa.

<< ¿Dónde estoy? >>

Miro a mi alrededor algo desorientada, el cuarto está a oscuras porque las persianas están bajadas casi del todo, solo se cuela un poco de luz por las rendijas de la misma, encuentro mis shorts por el suelo, yo aún llevo el trikini puesto, aunque con el lazo de la espalda desecho, mi camisa esta arrugada y desabotonada al final de la cama. No tardo en descubrir que estoy en el cuarto de Talon  ya que él está a mi lado durmiendo plácidamente, su ropa también esta tirada por el suelo.

martes, 24 de febrero de 2015

ESCAPADA RURAL - CAPÍTULO 7

Pool party


A pesar de haber dormido poco soy la primera en despertar, además hay trabajo por delante que hacer, ya que hoy queríamos preparar una barbacoa para comer y montar una fiesta en la piscina, aprovechando que la hay.

Intento despertar a mi compañera de cuarto suavemente meciéndola, pero al ver que no reacciona le empiezo a molestar dándole palmaditas en la cabeza, cosquillas y hasta soplándole la oreja, al final parece que responde a mis actos.

- Ya, ya, ¡ya me levanto! – Me dice Fiora indignada – ¿por qué tantas prisas? – y bosteza exageradamente
- Son casi las doce del mediodía y te recuerdo que hay que preparar la “pool party” – esta última palabra la digo con tono refinado (pijo) exageradamente.

Fiora parece que no escuche, pienso en otro plan.

- Sabes, tienes el desayuno preparado  esperando en la cocina – mentira – ¿lo vas a desaprovechar?
La estrategia es todo un éxito, solo tarda unos segundos en llegar a la cocina, yo aprovecho para tocar la puerta de Syndra y Zed para despertarlos también.

<< Mira que es glotona >>

La puerta está cerrada, la golpeo tres veces, pero sin obtener respuesta, al segundo intento abren la puerta, pero detrás de mí, es Talon que ha salido. Me giro hacia él, está apoyado en el marco de la puerta, con el pelo alborotado, está vestido solo con los vaqueros << ¡cómo me pone!, está muy sexy…>>, me muerdo el labio inconscientemente.