ESCAPADA RURAL - CAPÍTULO 7

Pool party

A pesar de haber dormido poco soy la primera en despertar, además hay trabajo por delante que hacer, ya que hoy queríamos preparar una barbacoa para comer y montar una fiesta en la piscina, aprovechando que la hay.

Intento despertar a mi compañera de cuarto suavemente meciéndola, pero al ver que no reacciona le empiezo a molestar dándole palmaditas en la cabeza, cosquillas y hasta soplándole la oreja, al final parece que responde a mis actos.

- Ya, ya, ¡ya me levanto! – Me dice Fiora indignada – ¿por qué tantas prisas? – y bosteza exageradamente

- Son casi las doce del mediodía y te recuerdo que hay que preparar la “pool party” – esta última palabra la digo con tono refinado (pijo) exageradamente.

Fiora parece que no escuche, pienso en otro plan.

- Sabes, tienes el desayuno preparado  esperando en la cocina – mentira – ¿lo vas a desaprovechar?

La estrategia es todo un éxito, solo tarda unos segundos en llegar a la cocina, yo aprovecho para tocar la puerta de Syndra y Zed para despertarlos también.

<< Mira que es glotona >>

La puerta está cerrada, la golpeo tres veces, pero sin obtener respuesta, al segundo intento abren la puerta, pero detrás de mí, es Talon que ha salido. Me giro hacia él, está apoyado en el marco de la puerta, con el pelo alborotado, está vestido solo con los vaqueros << ¡cómo me pone!, está muy sexy…>>, me muerdo el labio inconscientemente.

- Buenos días – me sonríe, yo le miro y al sonrojarme aparto la mirada.

- Bu…buenos días a ti también – tartamudeo un poco al contestar rápido

- Resulta adorable ese color en tus mejillas – me dice

Dicho esto, me coge de la cintura bruscamente y me atrae hacia él, con la mano libre me acaricia el cuello y el pelo con suavidad, después mirándome a los ojos me besa ferozmente en los labios, yo respondo con la misma pasión. Noto  que el cuerpo me grita de emoción, pero Fiora grita más fuerte desde la escalera quejándose de que no encontraba el desayuno por ningún lado. Paramos.

- En otro momento seguimos – le susurro a Talon, me separo de él y sonreímos mutuamente – ¡Era una broma para que te levantaras, boba! – le grito a Fiora y oigo como ella sube a zancadas las escaleras.

- Buenos días Fiora – le saluda Talon

- Hola… - refunfuña  ella

Me acerco y le doy unas palmaditas en el hombro a modo de disculpa, Syndra abre la puerta, sigue con la alegre sonrisa que le caracteriza

- ¡Hola a todos! – nos saluda con una amplia sonrisa

- ¡¿Que son esos gritos?! – se oye  Zed quejarse desde la cama

- ¡Nada cielo! – le contesta Syndra, se dirige a él dando saltitos y le alborota el pelo, él le coge de los muslos y la lanza a la cama  – ¡suéltame! anda levanta dormilón, que hay cosas que hacer.

- ¡Venga tortolitos! – les grito

Desganado le suelta y se levanta, nosotros nos reímos entre dientes. Syndra se dirige a la puerta de Fizz para abrirla, pero la detengo a media vuelta del picaporte.

- No, no, déjalo un rato más, así no nos molesta, luego si eso lo despertamos para que salga a comer – le digo moviendo las manos con dejadez

Bajamos y tomamos un desayuno ligero, ya que es tarde. Talon comienza a hablar.

- Entonces seguimos el plan del coche, ¿no? – dice mientras mastica una tostada

- Si, los chicos encargaros de hacer la barbacoa y los aperitivos y nosotras de la diversión – contesto

Ambos chicos responden  formando con las manos el signo de OK.

- Bien pues, chicas hay que montar en minibar para los cocteles, organizar los juegos y mirar que música ponemos… ¡a trabajar! – nos manda Fiora

<< Modo maestra ¡ON!, jajajaja>>

Nos ponemos manos a la obra. Los chicos son eficientes y mientras bromean asan la carne y preparan la mesa para comer. Yo he recopilado la música de mi portátil para que suene fuera, llaman para comer mientras busco los altavoces en  la maleta. Voy a bajar las escaleras cuando recuerdo que Fizz sigue encerrado, retrocedo y entro en su cuarto para liberarlo.

<< ¡El condenado sigue durmiendo como si nada!>>

A pesar de soltar las cuerdas no se despierta, tampoco cuando le muevo de un lado a otro, al final le doy un capón en la frente que si surte efecto.

- ¡¡A comer!! – le grito, y salgo corriendo de la habitación antes de que tome represalias contra mí.

Comemos tranquilos, bromeando casi todo el rato, hoy hacia un día caluroso, aunque se estaba muy a gusto a la sombra bajo el tondo del porche. Cuando acabamos todos se van a la piscina a refrescarse o a tomar el sol, yo subo a mi cuarto a cambiarme y ponerme un bañador. Aparezco con un triquini negro con lineas plateadas y pareo, aunque siempre estoy escondida bajo una gafas de sol. me escondo bajo la sombrilla, mi piel nívea parece que refleje el sol.

Fizz se acerca  a mí, le miro de reojo bajo las gafas de sol, ha cogido el color rosáceo de una gamba por tomar demasiado el sol.

- ¡Eii paliducha!, pareces un vampiro a dieta con esa piel tan blanca y estando siempre a la sombra – me dice

- No me gustaría quemarme como tú – replico – quiero mantener el tono – le guiño un ojo y le doy una palmada en la espalda, por la cara que pone cuando lo hago le ha debido escocer como la picadura de mil abejas.

- ¡Ahh! Serás hija de…

- De la luna, por eso no me gusta el sol – le corto, antes de que acabe el insulto y me río.

Talon nos llama desde el agua para que nos unamos a los juegos, me mira lascivamente << y me gusta>>.

- Te sienta muy bien ese atuendo, estas muy sexy - me sonríe juguetón
- Gra-gracias - tartamudeo- jejejej, a ti también te queda muy bien - le sonrío contenta
- Cuando vas a dejar de tartamudear conmigo jajaja - me pregunta
- No lo hago queriendo, te lo aseguro jejeje

Cuando Fizz se quita las gafas para zambullirse nos reímos todos porque tiene la marca de las gafas alrededor de los ojos por quemarse demasiado. Entre todos jugamos a un partido de vóley con la pelota, también a las carreras, a pillar, etc.

Después de noche seguimos la fiesta con las cocteleras y la música hasta bien tarde, Talon y yo bailábamos pegados muy sensualmente, de vez en cuando me besaba el cuello y notaba su respiración por mi nuca y cerca de la oreja, me excitaba mucho.

<< Dios, esto me pone realmente cachonda>>

Estábamos todos bastante ebrios y Fizz, que iba ya haciendo eses, dio un salto hacia mí y me empujó dentro del agua, de repente, antes de que me pudiera quejar por mi chapuzón repentino, todos me imitaron y se tiraron a la piscina también. Seguimos la juerga hasta bien entrada la madrugada, al final, agotados nos fuimos a dormir, yo me fui junto a Talon a su cuarto.