ENTRETENIENDO A LOS NIÑOS

Me dirijo a la escuela infantil donde trabaja mi amiga Fiora, me ha llamado alterada y me ha pedido si podía cuidar a los pequeños de su clase, que tenía que acompañar a una alumna al médico, que se había tragado un trozo de plastilina o algo así… y que la otra profesora no se podía encargar de ellos.

Cuando llego a su clase, Fiora me grita un “¡Gracias!” y sale por la puerta a paso ligero con la niña agarrada de la mano y quejándose de dolor de tripa. Miro a los alumnos.

- ¿Dónde se va la profe? – pregunta Annie abrazando su oso

- Ha ido a llevar a vuestra compañera al médico, esto… ¿os gustaría que os contara un cuento? – pregunto

- Valeee! – me dicen todos

- Uno de princesas! – me dice la niña del oso

- Noooo, de aventuras! – replica un niño

- Bueno, bueno… no recuerdo ninguno de princesas en este momento, pero os contaré uno en el que los protagonistas son algunos de vosotros....

“Esto eran dos amigos que estaban jugando en el bosque al escondite, se llamaban Teemo y Lulu ”

Me interrumpen.

- Ehh! Somos nosotros! – dice Teemo, Lulu sonríe

- Bueno sigo contando….

“Estaban jugando al escondite con Pix, ellos se escondían y el hadita los tenía que buscar. Teemo se fue a esconder en una cuevecita cerca de la playa y Lulu se subió a un árbol y se camufló entre las hojas. Cuando Pix acabó de contar hasta 100, se fue a buscar a los niños, cerca de donde estaba escondida Lulu vio moverse algo en un seto y pensó que sería alguno de los yordles y empezó a pulular por ahí como si fuera una mosca para descubrirlos, pero ninguno de ellos estaba ahí escondido, se trataba de una enorme bestia parecida a un cocodrilo que estaba dormido, Renekton, y estaba enfadado porque le habían despertado, cogió a la molesta hada y disparó con un golpe seco de dedos hacia un árbol cercano al que estaba Lulu”

Pix vuela velozmente a mi cara quejándose con tintineos.

- ¡Tranquila! – le digo

“Lulu que lo había visto todo, saltó enfurecida del árbol para recoger y ayudar a su compañera malherida”

- ¡Pobrecita! – grita Lulu

“A sus espaldas aparece el matón.

- ¿Es tuyo ese bicho? – pregunta Renekton de mala manera

- ¡No es un bicho! – replica Lulu – ¡es un hada y es mi amiga! – le grita malhumorada

- Pues dile, que si no quiere que la próxima vez le aplaste contra el suelo como un gusano, que me deje en paz y no me moleste más – le dice en tono amenazante, se da la vuelta mientras dice – ¡adiós mocosa!”

Me vuelven a interrumpir.

- Yo no soy una mocosa!!!! – grita Lulu

- Es solo un cuento – le digo y sigo con el cuento

“Lulu con un movimiento rápido de muñeca convierte al cocodrilo en un adorable animalillo del bosque, una  ardilla, este empieza a correr en círculos desorientado y sin entender que ha ocurrido, la brujita corre al bosque a esconderse antes de que desaparezca el hechizo.

Teemo, el pequeño explorador, llevaba en la cueva un rato esperando a que le encontraran, como se aburría salió de su escondite a buscar uno más fácil, se acercó a un claro y cerca de un grupo de flores vio un animalillo correteando muy mono, una ardillita”

- Cuidado es Renekton, es Renekton – gritaron varios de los niños al unísono

“Se acerca y como no intenta escapar lo coge en brazos. De pronto el animal sonríe malévolamente enseñando unos dientes afilados y sus ojos se vuelven rojos y brillantes, Teemo esta sombrado, pero no suelta el animal, este empieza a crecer y cambiar, el pelo se le transforma en oscuras escamas, pero llega un momento en el que pesa tanto que lo aplasta”

- Jummmm – protesta Teemo

“Renekton se levanta y se despega el yordle del trasero”

Todos los niños se ríen y yo me uno a ellos. Sigo con la historia.

“Bueno… despega a Teemo y lo lanza sin esfuerzo contra una roca cercana, gruñe y se va enfurecido al bosque buscando a la bruja. Teemo se levanta mareado y enfadado planea una venganza contra Renekton, esta cabreado porque el matón no se ha disculpado y le ha hecho daño, piensa en voz alta:

1º convertiré el bosque en un campo de minas, a la mínima que roce o pise una de mis setas ¡¡BOOOOM!!. Hasta luego cocodrilo, no te volveré a ver más – canturrea

2º en cuanto explote por los hongos lo bombardeare a dardos

3º escaparé triunfal corriendo

Y se esconde en unos arbustos cuando acaba de poner todos los hongos.

Mientras tanto, Fizz, que llevaba toda la mañana entrenando a su tiburón en la playa, iba a hacer un descanso para almorzar. Dejó el aro de acrobacias en la arena de playa y fue al bosque a buscar unas bayas que comer, se iba a meter en un arbusto a rebuscar cuando algo le pica en un ojo, el dolor es agudo y se extiende por el parpado, lo nota palpitar, es un dolor parecido al de una picadura de avispa…

- Pero que…? – dice aturdido

Antes de que pueda reaccionar otros dos dardos le alcanzan la cara, esta medio ciego, con los ojos hinchados y llorosos, Fizz lo veía todo borroso aunque distingue algo pequeño que está atrapado a una rama e intenta soltarse para huir. Cuando recobra la vista coge al pequeño atacante del cinturón y lo levanta a la altura de sus ojos, le quita la cerbatana.

- ¿Qué te he hecho yo para que me acribilles con los dardos? – pregunta Fizz a Teemo un poco alterado, intenta controlar los nervios

- Lo siento mucho, mucho, mucho… pensaba que era el matón de Reneckton, es muy malo. Perdóname… - replica Teemo, poniéndole un ‘tierna carita triste’ ”

Tristana interrumpe.

- Claro, si es que es tan mono – dice Tristana, Teemo sonrie

Le coge una mejilla a Teemo y le planta un beso en esta, él se pone colorado mientras se ríe, Amumu al fondo lloriquea tímidamente mientras susurraba algo así como que a él no le quiere nadie.

“Fizz puso los ojos en blanco.

- Te perdono…, pero no es seguro para la gente que estes por aquí, eres un peligro para ellos, la gente normal no lleva bien eso de que le escupan un pincho envenenado a la cara, te ayudaré a buscar a ese reptil rabioso

Se adentran un poco en el bosque, Fizz para al lado de un árbol cuando Teemo le para en seco cogiéndole del brazo.

- Detente, no pases por ahí, esta todo lleno de mis setas, como pises una explota, yo te diré por puedes pisar – le dice Teemo

- Quítalas cuando las veas, que alguien se puede lastimar con ellas – le contesta Fizz

Fizz evita las minas con ágiles saltitos y Teemo las desactiva y las retira. Dan un rodeo por los alrededores en las zonas donde habían estado jugando los niños y vuelven a la playa. Cuando tuercen un saliente encuentran a Renekton acorralando a Lulu contra una roca, ellos corren hacia ella

- ¡Dejala! – le grita Teemo

El cocodrilo no hace caso, gruñe y la acosa aún más acercándose a ella, va a estampar su cuchilla contra ella, pero Fizz corre e interpone su tridente evitando que la hiera. La pequeña corre hacia Teemo y lo abraza.”

<< Jejeje, Tristana está cogiendo el brazo de Teemo, esta celosa y como llore más Amumu vamos a tener que salir de aquí en barca>>

“Con otro hechizo Lulu hace crecer salvajemente a Fizz para darle ventaja, forcejea con el atacándole con su arma y Renekton corre al agua, intenta huir hacia alguna de las islas cercanas nadando, entonces Fizz lanza el aro, con el que estaba enseñando antes a su mascota, al mar y acierta en la posición del reptil.

- ¿Pensabas que me ibas a atrapar con un simple aro? Jajajaja – dice Renekton

- Yo no, pero Chomper si, tiene hambre – le responde Fizz

El cocodrilo sigue riendo, aparecen unas burbujas a su alrededor y Fizz sonríe, de repente el tiburón sale del agua de un salto con la boca abierta y se traga a Renekton.”

- Fiiiiiiinn!! – exclamo – os ha gustado?

- Siiiiiii – contestan todos

En ese momento entra Fiora en el aula.

- Vaya que entretenidos los tenías! Ya te puedes ir si quieres Diana… los padres y tutores ya vienen a recogerlos, me has sido de gran ayuda, muchísimas gracias! – me dice – si te esperas 10 minutos nos vamos juntas y te invito a comer.

- Claro!, por ti lo que sea – contesto sonriente